Thursday, February 10, 2005

Recursos subjetivos para la métrica

1. Saber mirar

El poeta ha de ser un observador nato, un vigilante de la realidad y del universo que está fuera y dentro de nosotros ya sean objetos, sentimientos o sensaciones utilizando todos los sentidos.

2. Educar el oído

El poeta es un músico que no toca ningún instrumento musical, pero hace sonar las palabras como si éstas fueran un arpa, un piano...
Hay que estar atento a la melodía o al sonido de las palabras. El componente rítmico de la poesía es muy importante y no hay que descuidarlo.

3. La lectura

No se puede escribir sin antes haber leído. Hay que rodearse y alimentarse de lectura y aprender a leer, a sacar el máximo provecho a los textos que caigan en nuestras manos para descubrir los mecanismos e intenciones que el escritor nos ofrece.

4. Imitar, no copiar

Uno de los objetivo s primordiales del poeta es conseguir una voz propia, su propio universo.
Imitar no es una tarea degradante, resulta muy enriquecedora. Todo poeta que se precie ha aprendido a escribir partiendo de sus autores preferidos. Casi todos los poetas que han perdurado coinciden en que sus libros están impregnados de la voz de sus maestros. Para conseguir una voz propia es necesario pedir otras voces prestadas, recorrer el camino que otros ya han andado y experimentar, en la medida de lo posible, los hábitos y formas de relacionarse con la poesía que otros les dieron resultado.

5. Las notas

Se recomienda en disponer de una libreta de notas o una grabadora. Facilita la labor el hecho de ir anotando en bruto todas las ideas que nos parezcan interesantes o aprovechables, ya que la experiencia de los poetas ha demostrado que muchas ideas o intuiciones se pierden o se diluyen en la memoria.

6. El trabajo

El poeta siempre está trabajando, activa o pasivamente. leer es trabajar y un ejercicio muy recomendable es sentarse a escribir la mayor de las veces posible aunque haya que desechar el trabajo. Este se puede guardar para otras ocasiones y sacar lo aprovechable. Esto es un entrenamiento diario para cuando llegue la inspiración y con ello se construir una obra maestra.